La máxima instancia judicial de Estados Unidos ha suspendido indefinidamente la implementación de la polémica ley de inmigración de Texas, la cual otorga a las autoridades estatales la facultad de detener y arrestar a individuos sospechosos de haber entrado al país de forma ilegal.
Esta suspensión se mantendrá en vigencia mientras el tribunal superior evalúa las apelaciones de emergencia presentadas por el Gobierno de Biden y otras partes interesadas, quienes solicitan a los jueces detener la puesta en marcha de la ley durante la resolución de sus objeciones legales.
La orden emitida este lunes no establece un plazo específico para la suspensión. La orden fue emitida por el juez Samuel Alito, quien supervisa los asuntos procedentes del tribunal de apelaciones encargado del caso en curso.
La ley en cuestión, denominada SB4, fue promulgada por el gobernador republicano de Texas, Greg Abbott, en diciembre pasado.
Su implementación inmediata generó preocupación entre los defensores de los derechos migratorios debido al temor de un aumento en el perfilamiento racial, así como por detenciones y esfuerzos de deportación llevados a cabo por las autoridades estatales en Texas, donde los latinos constituyen el 40% de la población.
“La Corte Suprema ha detenido temporalmente la implementación de la SB4, pero no ha limitado la autoridad ya existente de Texas para arrestar por violaciones de la ley de invasión criminal y otros delitos”, declaró Abbott en un comunicado emitido este lunes. Asimismo, añadió que “Texas seguirá utilizando todas las herramientas y estrategias disponibles para abordar esta crisis en la frontera, la cual fue generada por las políticas implementadas por la administración de Biden”.