El gobierno ha anunciado la ampliación de los permisos de trabajo que expiraban esta noche, y lo positivo es que esto no implica ningún costo para los migrantes.
Por segunda vez, la administración Biden ha extendido los permisos de trabajo de 180 días a 540 días para extranjeros en procesos de asilo, residencia permanente o aquellos beneficiarios del TPS. Esto implica que aquellos que renovaron sus permisos el 27 de octubre y que vencían ahora pueden continuar con sus trabajos.
Alrededor de 800.000 migrantes estaban en riesgo de perder sus empleos; no obstante, la renovación es automática, y los empleadores deben documentar la extensión del permiso, mientras que los beneficiarios no necesitan realizar ningún trámite.
El Servicio de Inmigración y Ciudadanía ha señalado hoy que es probable que no se pueda conceder una tercera prórroga debido a que los nuevos permisos de trabajo se otorgan por 5 años para evitar renovaciones constantes.