Lo que se ha convertido en un punto de discusión entre los republicanos conservadores que se oponen al próximo proyecto de ley de inmigración es impreciso. Esto es lo que plantea el consenso bipartidista.
El expresidente Donald Trump, el presidente de la Cámara de Representantes, Mike Johnson, y otros republicanos de postura firme han expresado su desacuerdo con un pacto bipartidista en ciernes sobre inmigración, argumentando que permitiría que 5,000 migrantes crucen ilegalmente la frontera sur diariamente.
«Es ilícito cruzar nuestra frontera. Sin embargo, al parecer, estamos gestando algún tipo de acuerdo que permitiría al presidente cerrar la frontera después de que 5,000 personas violen la ley», comentó Johnson, republicano por Louisiana, el miércoles. «¿Por qué 5,000? Si se suman, resultaría en un millón más de ilegales en nuestro país cada año antes de que tomemos medidas correctivas. Es absurdo. No deberíamos preguntarnos qué tipo de herramienta para hacer cumplir la ley se activaría cuando lleguemos a 5,000 cruces ilegales al día, porque ese número debería ser cero», afirmó utilizando un término considerado ofensivo para referirse a las personas migrantes irregulares.
Trump hizo una declaración similar a los periodistas el martes: «Es un pésimo proyecto de ley. ¿5,000 al día? Eso es demasiado. Es como un récord».
Pero, según los negociadores que están finalizando los detalles antes de publicar el texto completo de la legislación, esto no es realmente lo que haría el acuerdo bipartidista, posiblemente a finales de esta semana. Esto es lo que conocemos:
Los migrantes no serían meramente puestos en libertad.
La nueva propuesta legislativa impediría a los migrantes atravesar la frontera de manera no autorizada. Se acabaría con la práctica de «aprehensión y liberación», donde los agentes de la Patrulla Fronteriza liberan a los migrantes mientras aguardan audiencias migratorias.
En su lugar, aquellos que intenten cruzar la frontera sin autorización serían detenidos de inmediato, y su solicitud de asilo se resolvería durante su detención. Si no superan la entrevista de solicitud de asilo, serían expulsados inmediatamente en un plazo de 15 días.
¿Cuál es la situación de aquellos migrantes que buscan cruzar de manera legal presentando una solicitud de asilo?
En caso de que el acuerdo sea promulgado como ley, aquellos migrantes que arriben a la frontera estadounidense mediante un puerto de entrada oficial serán redirigidos hacia un nuevo «programa de autoridad de expulsión». En este programa, dispondrán de un plazo de 90 días para llevar a cabo su entrevista inicial relacionada con la solicitud de asilo. Estos individuos tampoco serían liberados; en su lugar, serían detenidos o sujetos a supervisión gubernamental.
En el caso de no superar la entrevista inicial de asilo, experimentarían una expulsión inmediata.
No obstante, aquellos inmigrantes que superen la entrevista de asilo tendrían la posibilidad de quedarse en el país durante un período adicional de 90 días hasta que se concluya su situación. Durante ese lapso, obtendrían una autorización laboral. Una vez que sus casos se resuelvan, podrían trazar una ruta hacia la ciudadanía.
¿Cuál es el origen de la cantidad de 5,000 diaria?
El pacto bipartidista contiene cláusulas que posibilitarían clausurar la frontera totalmente al alcanzar una cifra específica, pero se refiere a encuentros en la frontera, no a cruces. Como se ha indicado previamente, ningún individuo que busque ingresar ilegalmente a los Estados Unidos lograría hacerlo a menos que supere una entrevista de asilo o sea retenido bajo supervisión gubernamental.
Adicionalmente a estas disposiciones, el Departamento de Seguridad Nacional (DHS, por sus siglas en inglés) podría clausurar la frontera si surge un exceso de solicitantes de asilo. Luego de consultar con la Patrulla Fronteriza y autoridades del DHS, los negociadores elaboraron la normativa para otorgar al DHS la facultad de cerrar la frontera al alcanzar un promedio de 4,000 o más encuentros fronterizos en siete días. Un promedio de 5,000 o más en siete días resultaría en el cierre de la frontera. Si la cifra supera los 8,500 en un solo día, también se produciría un cierre forzoso de la frontera.
¿Qué sucede en caso de cierre de la frontera?
En caso de cierre fronterizo, hasta 1,400 inmigrantes diarios que intenten ingresar por los puertos de entrada oficiales mantendrían el derecho a que sus solicitudes de asilo sean evaluadas. Los demás serían denegados.
Los migrantes ubicados entre los puntos de entrada serían denegados de inmediato. Si la misma persona intenta cruzar dos veces durante el cierre entre los puntos de entrada, se le impediría ingresar a Estados Unidos por un año.
Para reabrir la frontera, los cruces deberían disminuir por debajo del 75% del número que provocó el cierre durante siete días. Luego, el DHS tendría hasta dos semanas para reabrir gradualmente la frontera según la capacidad.
Existe un límite para el tiempo de cierre fronterizo para prevenir abusos. Para 2024, el límite es de 270 días, pero la cifra está destinada a variar año tras año, considerando la expectativa de los negociadores de que los cruces de inmigrantes disminuirán con la nueva ley en vigencia.
La acción busca desincentivar travesías no autorizadas.
Los mediadores confían en que, con el tiempo, esta normativa, y el cese de la táctica de detención y liberación, alentará a los migrantes a pedir asilo de manera legítima en los puntos de entrada, en lugar de intentar atravesar ilegalmente entre estos.
La propuesta de ley también incrementará los requisitos para solicitar asilo. Además, asignará más recursos para la frontera, como la ampliación de la capacidad de los centros de retención para los migrantes en espera de solicitudes de asilo.
